domingo, 17 de enero de 2010

Maneras en el dojo

Todo estudiante de karate, independientemente de su rango o antigüedad, obedece una ley al ingresar en cualquier dojo o dojang. Las maneras, rituales y costumbres del karate ayudan a dar la tónica de la disciplina y el control. El estudiante de karate se quita los zapatos antes de penetrar en el dojo y se inclina ceremoniosamente al entrar en el área de práctica de karate. Al principio y al final de cada lección, el estudiante de karate se inclina ante su maestro y eso mismo hace ante sus compañeros, antes y después de cada práctica de sparring. Allí, el silencio es obligatorio y los estudiantes escuchan atentamente al maestro, no se permiten cuchicheos ni conversaciones en voz alta. La jactancia es sumamente impropia y el comportamiento bravucón queda totalmente eliminado. La disciplina en karate es estricta pero siempre cortés. El gran respeto hacia el maestro de karate es más que un ritual, ya que se lo ha ganado con su habilidad y maneras. Los estudiantes nuevos, en karate, siempre se impresionan enormemente con la gentileza y humildad de un maestro de karate sénior. Todos saben que su opinión acerca del carácter de los estudiantes, en la que se incluye buen espíritu deportivo, humildad y gentileza, influye definitivamente en la decisión que él tome acerca de si están o no listos para aprender técnicas avanzadas de karate. La prontitud física no es el único requisito de las promociones, el karate es un todo.

Seguridad y precauciones en karate: La actitud de todos los que se encuentran presentes en el dojo o dojang, es de gran atención, y esto es primordial, ya que una instrucción u orden mal oídas puede suscitar un grave daño. Cada estudiante aprende rápidamente que la mejor precaución de seguridad consiste en una atención sin límites a las palabras del maestro de karate. Los avanzados, al igual que el instructor enteran a los novatos, tanto oralmente como por medio de ejemplos, que la seguridad depende de la fiel observancia de las reglas al practicar el deporte. El karate es un deporte exento de daños o lastimaduras, siempre y cuando se observen cuidadosamente las instrucciones del titular o maestro de karate. La práctica de técnicas avanzadas, aun cuando éstas puedan parecer engañosamente sencillas, singla supervisión del maestro pueden ocasionar más de un hueso roto.


Reverencia: La reverencia o inclinación oriental es la forma acostumbrada de demostrar respeto, al igual que el apretón de manos o el "hola" del mundo occidental, y en el karate no es diferente. De forma similar al apretón de manos en el boxeo y en el fútbol, la reverencia en el karate significa : "Estoy listo", al principio, y "Gracias", al finalizar. Esta reverencia usualmente se lleva a cabo de pie, pero en ocasiones de ceremonia,, puede verificarse de rodillas. En el karate la acción empieza inmediatamente después de la inclinación, y al realizarse al finalizar el encuentro, pone punto final a cualquier conducta agresiva adicional.

1 comentario:

Anónimo dijo...

estoy de acuerdo.

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